Super Bomberman R 2 es la última entrega de la popular franquicia de Konami que busca revivir la diversión y la emoción de los juegos clásicos de la saga. Sin embargo, a pesar de todas las expectativas y el potencial que podría tener, el juego no logra cumplir con las expectativas y se queda corto en muchos de sus aspectos.
Una de las grandes novedades de Super Bomberman R 2 es el nuevo modo llamado Castillo, que se presenta como un juego de estrategia tipo tower defense. En este modo, un grupo de jugadores debe conseguir llaves para abrir cofres situados en la parte superior del escenario, mientras son atacados por un jugador que defiende el castillo. A primera vista, esta propuesta suena interesante, pero desafortunadamente no termina de cuajar. Las partidas se vuelven caóticas e incontrolables, especialmente si se juega en solitario. La falta de coordinación entre los jugadores y las trampas colocadas por el jugador defensor hacen que el modo no sea tan divertido como se esperaba en un principio.
Otro aspecto que deja mucho que desear es el modo historia. A través de una serie de eventos y misiones obligatorias, los jugadores deben explorar diferentes planetas en una vista cenital, rompiendo rocas y derrotando enemigos para conseguir Ellons, unos peculiares alienígenas. Sin embargo, este modo resulta aburrido y carente de interés. El desarrollo de las misiones es monótono y predecible, y las escenas de corte que se intercalan entre ellas son extremadamente tontorronas y no aportan nada al juego. Aunque se pueden saltar, estas escenas solo entorpecen la experiencia general. Lo único destacable de esta modalidad son algunas zonas secretas de puzles más acotados y directos, que brindan algo de variedad y desafío al conjunto.
Por otro lado, uno de los puntos fuertes de Super Bomberman R 2 es su editor de niveles, que permite a los jugadores crear sus propias arenas de combate para el modo Castillo. Aquí, los jugadores pueden colocar diferentes tipos de trampas que se desbloquean a medida que se avanza en la campaña. Aunque el editor en sí mismo es interesante y da libertad creativa a los jugadores. Un punto a favor.
Sin embargo, a pesar de todas las nuevas incorporaciones y modos, donde realmente brilla Super Bomberman R 2 es su vertiente más clásica. Los modos de Batalla y el battle royale, donde los jugadores compiten para ser los últimos en quedar de pie, siguen siendo tan divertidos y adictivos como siempre. Konami sabe que estos modos son los favoritos de los fanáticos y los mantiene intactos en esta entrega. Además, se incluyen temporadas con recompensas desbloqueables, como skins, músicas y títulos, para mantener a los jugadores motivados a jugar durante bastantes horas.
En cuanto al aspecto técnico, Super Bomberman R 2 deja mucho que desear. El rendimiento del juego es francamente lamentable, especialmente en el modo historia donde la tasa de fotogramas y la resolución son muy bajas. Incluso en los escenarios multijugador, el juego sufre de continuas ralentizaciones y tiempos de carga excesivamente largos. Este problema afecta la fluidez de la jugabilidad y puede ser frustrante para los jugadores.
En resumen, Super Bomberman R 2 es una decepción. A pesar de contar con la fórmula clásica de la serie, el nuevo modo Castillo no logra ser divertido y incomprensiblemente resulta caótico e incontrolable. Además, el modo historia deja mucho que desear, con un desarrollo aburrido y escenas innecesarias que no aportan nada a la experiencia. Los modos clásicos de Batalla y el battle royale son divertidos, pero se ven afectados por los problemas de rendimiento del juego. Como nota positiva, el editor de niveles y las zonas secretas de puzles son lo único rescatable del juego
Lo mejor
La jugabilidad clásica sigue siendo la bomba {alertSuccess}
Lo peor
Técnicamente es deficiente y con insufribles tiempos de carga{alertError}